10 Dic 07:52h
Mendoza dio un paso decisivo y de alto voltaje económico al aprobar por ley el proyecto de cobre San Jorge (PSJ Cobre Mendocino). Envió así una señal de previsibilidad a los inversores locales y extranjeros, a pesar de las masivas movilizaciones de ambientalistas que denunciaron la iniciativa como un riesgo social y ecológico.
El Senado provincial blindó la obra el martes 9 de diciembre con 29 votos a favor, 6 en contra y 1 abstención, consolidando un marco legal que busca resguardar el proyecto ante futuros cambios normativos y convertirlo en un nuevo motor de la matriz productiva mendocina.
Mientras se desarrollaba el debate legislativo, miles de personas se movilizaron desde Uspallata y el Valle de Uco hasta Plaza Independencia, advirtiendo con pancartas y cánticos que “El agua no se negocia”. La protesta evidenció la resistencia social al emprendimiento, que la policía controló con un fuerte operativo para evitar incidentes.
La aprobación incluyó también la creación del Distrito Minero Occidental II, la Ley de Regalías Mineras y el Fondo de Compensación Ambiental, reforzando el marco institucional para la minería.
El proyecto, ubicado en Estancia Yalguaraz, Uspallata, obtuvo luz verde para avanzar en su factibilidad e iniciar la fase de construcción orientada a producir concentrado de cobre. Esto representó un hito institucional, al ser el primer proyecto de explotación minera aprobado integralmente bajo la Ley 7.722, conocida por su rigurosidad.
La inversión estimada para la iniciativa asciende a 559 millones de dólares, distribuidos en 461 millones para la construcción y 81 millones para la operación inicial, con una producción proyectada de 40.000 toneladas de cobre fino por año en la etapa base, con potencial para alcanzar las 70.000 en el segundo año, y una vida útil inicial de 16 años, extensible a 27.
Previo al tratamiento de la ley, el proyecto recibió el respaldo explícito del presidente Javier Milei, quien aseguró en redes sociales que «Es lo más cerca que se ha estado de poner en marcha definitiva la minería de Mendoza en los últimos 20 años». El mandatario agregó que «Esta nueva Argentina crecerá de la mano de los tres principales vectores de la economía, el campo, la energía y la minería», y vinculó la iniciativa con el impulso a una Argentina más libre y próspera promovida en el Pacto de Mayo.
Además, San Jorge se postuló para acogerse al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), la ley nacional diseñada para desatar inversiones de más de 200 millones de dólares. Detrás del proyecto se encuentra Minera San Jorge S.A., integrada por la suiza Zonda Metals GmbH y la argentina Alberdi Energy.
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