
20 Oct 12:41h
El concepto de la muerte es, para muchos, un abismo de preguntas sin respuesta, un final tajante que deja a su paso dolor y vacío. Sin embargo, para Daniela Páez Gerez, el final terrenal es solo la antesala de una comunicación que trasciende los planos. Daniela, quien se define como médium o «comunicadora de almas», dedicó años de su vida a desentrañar este misterio, un camino que la llevó a mediar entre quienes partieron y quienes se quedaron. Su historia se compartió en el programa ¡¿Quién sos?!, conducido por Celeste Williner en el canal Pelado Stream.
La búsqueda de Daniela por su vocación no fue inmediata. Relató que, de niña, le tuvo pánico a la muerte; pensó que era una entidad nocturna que se llevaría a su madre, lo que la mantuvo despierta y vigilante durante años.
Aunque en su casa se normalizaron fenómenos como sentir a alguien sentado en la cama, la médium relató que su verdadera inquietud se agudizó con la pandemia. Esta etapa de temor la impulsó a cuestionar las creencias religiosas que no la satisfacían plenamente y a indagar qué había realmente después de la vida. Esta necesidad de saber y de servir a los demás la condujo a formarse como médium, aunque reveló que en su familia ya existía una apertura hacia lo paranormal, incluso con su madre mencionando la presencia de un hombre cruzando las paredes de la casa.
Daniela explicó que, si bien todos los seres humanos tienen la capacidad de conectar con otros planos, la sociedad muchas veces cierra esas habilidades. Su método personal de comunicación con las almas es la «escritura automática». En sus sesiones, ella hace una oración de apertura delante del consultante y luego anota todo lo que el alma le dice, transmitiendo los mensajes con los sentimientos incluidos.
Ella comentó que las almas son sabias y amorosas, y siempre aparecen aquellas con mayor urgencia de comunicarse, aunque también pueden ser buscadas por nombre si el consultante desea hablar con una en particular.
Los mensajes que brindan las almas se caracterizan por el amor y la calma. Daniela subrayó que, aunque las almas mantienen su esencia y personalidad terrenal, estas se encuentran evolucionadas, ofreciendo palabras que alivian el dolor y las preguntas sin respuesta del consultante. Su objetivo principal, aseguró, es que las personas se vayan con una sensación de alivio y una mirada diferente sobre la muerte y el más allá.
La médium enfatizó que las almas pueden y deben ser lloradas, pues es parte de un duelo activo y amoroso. También aconsejó honrar a los difuntos y recordarlos, incorporando su memoria en las reuniones familiares, sin importar los errores que cometieron en vida, pues nadie fue perfecto. Sugirió que cada quien elija la forma de recordarlos que le resuene, ya sea encendiendo una vela, ofreciendo una misa o poniendo una canción.
Respecto a la reencarnación y la naturaleza del alma, Daniela afirmó que ella cree firmemente en que se reencarna muchas veces y que el alma es una sola, pero con la capacidad de estar en diferentes planos al mismo tiempo. Para tranquilizar a quienes temen no volver a encontrarse con sus seres queridos, aseguró que sí o sí nos encontraremos con ellos cuando sea nuestro momento de trascender, pues una parte de su alma esperará.
Finalmente, sobre el tema de las almas con baja energía o en el bajo astral, la médium argumentó que todas son inherentemente buenas, pero que su energía densa, a veces producto de muertes abruptas o no haber perdonado, puede manifestarse en movimientos torpes como la caída de un cuadro. En estos casos, su trabajo es conversar y acompañar a estas almas, mostrándoles con amor que ya no tienen cuerpo y deben subir a un lugar mejor.
Concluyó la entrevista con una reflexión de un alma consultada: «un buen vivir para un buen morir», un mensaje de esperanza y de una mirada más consciente sobre la vida y la ausencia.
PELADO STREAM
Sin comentarios